De acuerdo con los investigadores, la joven que también padecía el mal de Chagas presenta señales de una fuerte destrucción de los huesos del rostro y la frente, la cual podría haber sido provocada por un golpe contundente.

“Esto sustenta la hipótesis de un homicidio ritual del tipo ya descrito anteriormente en momias sudamericanas de individuos que sufrían la enfermedad crónica de Chagas”, dice el estudio.

Sin embargo, Emma Brown, del departamento de arqueología de la Universidad de Bradford en el Reino Unido, quien no participó en el estudio, opina que resultaría difícil determinar la causa de la muerte de la joven, debido a la falta de datos contextuales.

“Esta joven tiene una edad superior a la de las víctimas comunes de sacrificios que tenían típicamente entre 13 y 14 años (…) Es importante tener en cuenta el contexto histórico en que vivió la joven. Los análisis de datación por radiocarbono cubren el período de la conquista española de América”, argumenta.

Para desarrollar su investigación, los científicos utilizaron una imagen computarizada completa del cuerpo, técnicas de análisis de ADN, análisis de isótopos y reconstrucciones forenses en 3D.

Según el resultado del método de datación por radiocarbono, la joven podría tener entre 20 y 25 años en el momento de su muerte, y vivió entre 1450 y 1640 A.D.

Aunque no se ha especificado el lugar exacto de su residencia, los análisis de isótopos de nitrógeno y carbono de su cabello muestran una dieta que incluía probablemente maíz y pescado, así que podría haber pertenecido a regiones costeras.

Los autores de ese hallazgo han puesto sus esperanzas en que este análisis ayude al estudio del pentágono del mal de Chagas y su estructura molecular.

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