Baviera, Baden-Württemberg y Hesse, en Alemania; Ontario en Canadá, y Véneto en Italia son regiones en el mundo con unas balanzas fiscales similares a las de Catalunya y un nivel de riqueza equiparable. Así lo expone Ángel de la Fuente, director de Fedea y asesor del Gobierno en financiación autonómica, en un informe presentado por el Instituto de Estudios Económicos (IEE) en el que desmonta los supuestos agravios fiscales a Catalunya.

Las otras Catalunya (en lo fiscal) pueden ser Baviera o Hesse, que presentan unos déficits fiscales ligados solo a la financiación regional del 2 y el 2,3% del PIB, mientras que en Catalunya era del 1,7% en 2010.  De la Fuente sostiene que el modelo de financiación de los länder de Alemania nada tiene que ver con un paraíso confederal para territorios ricos. “La Alemania real es un sitio bastante más prosaico (…) Su sistema de financiación es muy parecido al nuestro en lo enrevesado de su estructura”.

El asesor financiero compara las cuentas de Catalunya con las de las regiones italiana. “Se ajustan al patrón italiano. Catalunya tiene una renta relativa muy similar a la del Véneto y el saldo fiscal es muy parecido, incluso algo mejor”. Lo mismo pasa entre Madrid y Lombardía.  

La situación financiera de Catalunya se compara con la de Ontario (Canadá), la región más poblada del país con 13,5 millones de habitantes, que presenta un déficit fiscal del 2,33% del PIB, menor que en la comunidad catalana. Pero es un territorio más rico. Ángel de la Fuente también compara las balanzas catalanas con el sureste de Inglaterra, que tiene un déficit fiscal dos veces mayor que el catalán.

Si se compara con EEUU, Catalunya pierde, sobre todo si se mide con el cálculo de la Generalitat. Pero de la Fuente dice que “es dudoso que convertirnos en americanos mejorase nuestra suerte fiscal”, porque supondría “un significativo adelgazamiento del Estado del Bienestar”. El autor calcula el déficit fiscal que tendría Nueva York con un modelo de financiación que aumentara el gasto federal, repartiera de otra manera los recursos e incrementara el tamaño de la administración pública; el resultado es que el déficit se acercaría mucho al catalán. El de Nueva Jersey sería incluso mayor.