
Vamos a ver también los lugares que Benedicto XVI dedicó su tiempo para estudiar, pasear, escribir y descansar. En la foto, estampa típica del Alto Adige. Foto: www.suedtirol.info
Estimados lectores:
Tras el inesperado y definitivo retiro del Papa Benedicto XVI y la entrada como máximo responsable de la Iglesia Católica del nuevo y genial Papa Francisco, vamos a repasar, como homenaje al Papa Emérito Benedicto, los lugares más importantes de Joseph Ratzinger, sus lugares favoritos donde pasar las vacaciones, los sitios donde él mismo ha reconocido ser “inmensamente feliz” o donde ha pasado mucho tiempo antes de su vida en Roma.
Antes de nada aprovecho para remitiros a la Ruta por Baviera, que publiqué no hace mucho aquí en El Viajero Incansable. Tanto Munich, el lago Chiemsee como Salzburgo son lugares señalados en la vida de Ratzinger. Múnich, por haber estado estudiando allí durante un tiempo y ser su Arzobispo, el lago Chiemsee y el Chiemgau por ser la zona donde nació su madre y Salzburgo por ser un destino habitual de los Ratzinger los fines de semana allá por los convulsos años 30.
Por lo demás, en cuanto al resto de sitios que vamos a ver, destacamos tres zonas geográficas: El Valle de los ríos Inn y Salzach, el Alto Adige, Tirol del Sur y las Dolomitas (Italia) y la Alta Baviera. (Oberbayern). Todo destinos muy bonitos que ya veremos en una ruta en el futuro, como la Ruta “Silveretta”, que discurre entre Liechtenstein y Venecia. Vamos a ir viendo los lugares ordenadamente, de manera cronológica: Infancia, Juventud y edad adulta, época como Obispo de Roma y la actualidad-mención a Castel Gandolfo.
Infancia del Pontífice. El Valle del Inn y el Salzach: Marktl, Tittmoning, Aschau, Traunstein y Alt Ötting.
Imagen del río Inn a su paso por Marktl, pueblo natal de Benedicto XVI. Foto: www.ganz-muenchen.de
A apenas unos kilómetros de la frontera con Austria, en el triángulo que forman estas localidades se encuentra una zona tranquila, poco conocida, de tradiciones y convicciones católicas muy arraigadas. Cuenta con gente abierta y muy campechana, temperaturas más suaves en comparación con el resto de Alemania e inviernos con nieve que duran de octubre/noviembre a marzo/abril. Rodeada de lagos (Chiemsee, Tachingersee y Waningersee), a 50 kilómetros de la segunda ciudad austríaca, Salzburgo, y entre las cuencas de los ríos Inn y Salzach nació y creció Joseph Ratzinger.
Marktl am Inn: Es el lugar de nacimiento de nuestro Papa Emérito. Pequeña pero bonita población ribereña de un río bastante grande, el Inn, hoy en día se conserva su casa, muy antigua, como casi todas las de la zona, con su correspondiente placa conmemorativa. Destacamos de Marktl la Iglesia de Sankt Oswald, la de Sankt Nikolaus del siglo XV, la Ermita de San Sebastián y las Reservas Naturales de Dachl y Alzmündung.
Tittmoning y su castillo. Ratzinger ha reconocido haber sido muy feliz aquí. Foto: Ratzinger Forum
Tittmoning: Tras dos años de vida en Marktl, la familia Ratzinger se mudó a este bonito pueblo cercano a Marktl. Benedicto XVI reconoce que de Tittmoning guarda buenísimos recuerdos del parvulario, hasta el punto de considerar éste “un lugar mágico” en su infancia. De Tittmoning vemos su impresionante castillo, por donde nuestro personaje ha dado grandes paseos, la Plaza Mayor, con sus coloridos edificios y la Abadía de San Lorenzo.
Aschau am Inn: Con 6 años, la familia del Papa vueve a mudarse, esta vez a otro pueblo ribereño del Inn, de ahí el nombre. Aquí recibió la Primera Comunión y a punto estuvo de morir ahogado jugando cerca de un lago cercano con sus hermanos. Señalamos que Aschau es un típico pueblecito bávaro con mucho encanto y color, rodeado de naturaleza con su correspondiente y antigua Iglesia cargada de arte, donde todos se conocen y se vive sobre todo de la ganadería vacuna, la agricultura y los pequeños negocios. Aún hoy en día en pueblos como este nos encontramos a la gente, hombres y mujeres, vestidos impecablemente de Domingo con los trajes típicos yendo a Misa, a comer a un Biergarten cercano o a un merendero con vistas al río o lago de turno de la zona si hace buen tiempo.

Imagen actual del centro de Traunstein, donde Joseph Ratzinger acabó el Bachillerato. Foto: www.bavaria-dream.es
Traunstein: En 1937 hubo otro cambio: Los Ratzinger se mudaron a una casa-granja a pocos kilómetros del centro de esta villa lugar del que Benedicto ya dijo “Después de muchas mudanzas aquí encontramos nuestro verdadero hogar. De vez en cuando vuelvo atrás y recuerdo esos tiempos con mucha alegría.” Aquí terminó el Bachillerato tras la guerra y celebró su primera Misa en el año 1951. Capital de la circunscripción o Kreis del Chiemgau, está a tiro de piedra de las enormes Minas de Sal de Bad Reichenhall, el lago Chiemsee o Mar de Baviera y el pueblo de Berchtesgaden. Destacamos su amplia y bonita plaza principal, la Capilla de San Roberto y su privilegiado emplazamiento a los pies de los Alpes Alemanes, rodeado de agua y bosques.

Estampa invernal de Altötting, con su conocido mercado de Navidad. Foto: www.bayern.by
Altötting: A este conocido lugar de peregrinación solían acudir los Ratzinger con asiduidad. Famoso por su Virgen Negra, Joseph Ratzinger manifestó en su día lo siguiente: “Tengo la suerte de haber nacido cerca de Altötting. Las peregrinaciones con mis padres y hermanos a este lugar de gracia forman parte de mis mejores recuerdos. Es el corazón de Baviera, uno de los corazones de Europa.” Y no es para menos. Su maraviloso conjunto de casas bajas con balcones de madera llenas de flores, sus iglesias con los campanarios con esa forma tan característica más propia de la Europa Oriental, su Capilla de Gracia y demás hacen de este lugar un sitio difícil de olvidar y de visita más que recomendable si vamos por esa zona que da muchísimo de sí. Todo el pueblo, como los muchos otros de la zona apenas cuenta con ninguna referencia arquitectónica a la modernidad reciente; todo perfectamente cuidado en medio de un bosque, rodeado de prados y con sendas granjas de madera desperdigadas en la inmensidad del paisaje.
Como hemos visto, estos lugares nos indican las fuertes raíces bávaras del Emérito Papa, que no sólo se le nota por su fuerte acento sureño cuando habla alemán, sino también por la cantidad de referencias a esta maravillosa zona de Alemania que ha hecho a lo largo de distintas audiencias, autobiografías y relatos varios a lo largo de su vida.
Juventud y edad adulta del Joseph Ratzinger. Frisinga y Ratisbona.

Vistas al centro de Frisinga. En la Catederal, en segundo plano, se ordenó sacerdote Ratzinger. Foto: Kompass Karten
Tras la guerra y la época en Traunstein donde estaba la casa familiar, el joven Joseph Ratzinger fue a Frisinga a estudiar Teología Católica y Filosofía. También aquí se ordenó sacerdote en la Catederal y más tarde a finales de los 70 fue ordenado Arzobispo de Múnich-Frisinga. Freising es un sitio curioso. Esn este lugar se dictó la Ley de la Pureza de la Cerveza, aún vigente desde el siglo XVI y es sede de la cervecería más antigua del mundo. Destacamos de Frisinga su blanca y simplista Catederal, más discreta que los demás templos de la zona o Kreis, la Iglesia de San Jorge, su preciosa e inmensa Plaza Mayor…Es un lugar cargado de historia y francamente bonito, a las afueras de Múnich, capital de Baviera y del Sur de Alemania.

Vistas al centro de Ratisbona, Patrimonio de la Humanidad. Foto: Unesco
Vemos también Ratisbona,o Regensburg, “la tierra de su corazón,” donde vive su hermano Georg (Director del famoso coro de Ratisbona “Domspatzen” durante 30 años). Aquí están enterrados sus padres y en este lugar dio clases en el seminario. Aquí admitió que es donde fue más feliz y reconocío que “aquí estoy realmente en casa” en su visita en 2006.
Ciudad donde confluyen los ríos Regen y Danubio (este último río recorrerá todo Europa Oriental hasta desembocar en el Mar Negro), cuenta con un impresionante y bonito casco histórico Patrimonio de la Humanidad. Ciudad eminentemente universitaria, es la cuarta ciudad de Baviera en cuanto a población. Vemos la Catederal de San Pedro, parecida a la de Colonia (Alemania Occidental-Valle del Rin), el viejo puente que cruza el Danubio, y el Walhalla, monumento curioso con aires de Partenón a las afueras de la ciudad.
Época como Sucesor de Pedro. Los lugares de descanso del Papa.
Paisaje del Valle de Aosta, Italia. Foto: ANSA
A parte de la villa de Castel Gandolfo, vamos a ver por encima dos privilegiadas zonas de los Alpes donde Benedicto XVI, al igual que JuanPablo II ha decidido ir a descansar como alternativa a la Villa Pontificia al Sur de Roma.
El Valle de Aosta: Lugar preferido de Benedicto XVI para ir a estudiar alejado del bullicio, las audiencias y los actos oficiales. Hablamos concretamente del pueblo de Les Combes, en la casa de los Salesianos. A los pies del Mont Blanc, y a apenas una decena de kilómetros de Francia, este lugar está rodeado de Reservas y Parques Naturales, cimas de gran altura y una gran concentración de cuatromiles. Aire limpio, alimentación de primera y mucha tranquilidad. Poco poblado y lleno de naturaleza virgen, este lugar está situado en un enclave cuyas características del paisaje, aunque más extremas, se asemejan bastante al de su Baviera natal. Está salpicado de montañas y precipicios de aúpa, escarpados valles e inmensas formaciones rocosas. Cuenta con pequeñas poblaciones bastante parecidas a las de nuestra Huesca patria, con casas de pizarra con estructuras de madera adornadas con coloridas flores de la zona.
La capital de este lugar, Aosta, enclave de los Saboya, es una ciudad muy monumental con bastantes referencias romanas por su origen y otras tantas medievales por el poder que tuvieron los señores feudales que poblaron este lugar alejado del mundanal ruido.

Imagen de Bressanone, en el Alto Adige. Foto: www.hotelgruenerbaum.it
El Alto Adige (Tirol del Sur): En cuanto al segundo lugar alternativo a Castel Gandolfo, donde Ratzinger ha pasado sus vacaciones, vemos Bressanone, en la Provincia de Bolzano, por la zona de las Dolomitas. Destacamos su espectacular situación, verdes prados y enormes paredes de roca elevándose a considerable altura, con pequeñas poblaciones cargadas de arte e inalteradas en el tiempo. En este lugar, en su Seminario Mayor ya se había alojado alguna temporada el Papa Emérito por los años 70. En este época de vacaciones, nuestro personaje, ciudadano honorífico de Bressanone, disfrutaba de paseos por la montaña, del piano y de la tranquilidad para estudiar, escribir o leer acompañado de su hermano, su secretario el arzobispo germano Gänsewein, y algún que otro gato de los suyos. Pudiendo disfrutar de productos estrella de la zona como su buenísima leche, o las manzanas verdes del Tirol del Sur, Bressanone o Brixen ha sido uno de los lugares más queridos por el Papa para descansar. Habitual destino para los amantes del deporte alpino, destacamos de Bressanone su impresionante Catederal barroca, la Iglesia de San Miguel y el Palacio del Obispo. Todo ello rodeado de montañas y viñedos. Este lugar, que linda con el Tirol septentrional (Alemania y Austria) tiene fuertes influencias germánicas no sólo en la lengua sino también en la gastronomía (strudels de manzana y vino especiado, productos que Joseph Ratzinger conocerá francamente bien) y en la arquitectura, que pinta más germana que italiana.
Si os parece esta zona (Cortina d’Ampezzo, Merano, el Monasterio di Monte Maria) ya la repasaremos próximamente y podremos ver sus pueblos, lagos y paisajes (como las Tres Cimas del Lavaredo-Dolomitas Orientales donde se dejó ver de excursión a Juan Pablo II) con más calma.
La actualidad. ¿Qué tiene el lugar donde se encuentra ahora mismo BXVI?

Imagen lateral de la Villa Pontificia con vistas al lago Albano, que queda colina abajo. Foto: Trome
Castel Gandolfo, villa pontificia con derechos de extraterritorialidad situada en la Región italiana del Lacio, es una pequeña pero preciosa población a orillas del Lago Albano, a unos 30 kilómetros de Roma. Es residencia de los Papas desde el siglo XVII y desde antiguo ha sido lugar de grandes villas romanas donde patricios, señores feudales y nobles han ido a descansar. A día de hoy Benedicto XVI reside en la Residencia o Palacio papal an a espera de trasladarse al monasterio sito en la misma Ciudad del Vaticano “oculto al mundo y en oración.”
Siendo un bonito complejo con vistas al lago y con Observatorio Astronómico Vaticano incluido con dos grandes telescopios en su correspondiente azotea, es el lugar tradicional de descanso de los Papas.
El pueblo en sí está lleno de tesoros arquitectónicos; vemos la Iglesia Parroquial, obra de Bernini, La Iglesia de Santa María Asunta y una serie de históricas y bonitas villas romanas como la Barberini y Torlonia. Con esto, se añaden los importantes restos arqueológicos diseminados por la zona de origen romano. Aunque es un lugar bastante turístico y muy conocido, ha sabido mantenerse con el paso del tiempo, alterarse poco o nada y mantener ese aire renacentista tardío que le caracteriza, con sus rincones y calles como sacadas muchos siglos atrás.
Se considera, además, como uno de los pueblos más bonitos de Italia y parte del municipio se encuentra dentro del Parque Regional de los Castelli Romani. Está considerado también como un “Borgho più Belle d’Italia” o De los pueblos más bonitos de Italia, cuya denominación ya conocemos y hemos visto en las dos rutas por la Umbría. (Etapa 1 y Etapa 2)
Después de las obras de remodelación del futuro hogar de Benedicto XVI, el Papa Emérito será trasladado de Castel Gandolfo al Convento de clausura Mater Ecclesiae, en una apacible zona de los Jardines Vaticanos, un monasterio de poco más de 20 años, construido para que las monjas que allí vivieran pudieran rezar por el Papa y la Iglesia, por orden de Juan Pablo II. Las religiosas que residían en este lugar ya no vivirán allí, puesto que en un principio sólo vivirá Ratzinger acompañado de sus más cercanos.
Foto reciente del Monasterio donde vivirá sus últimos días Benedicto XVI. Foto: Filippo Monteforte/Getty Images
Esperemos pues que nuestro Papa Emérito disfrute y descanse en el bonito sitio de Castel Gandolfo y viva en paz y tranquilidad más tarde, en el Convento Mater Ecclesiae.
Ojalá queridos lectores os haya gustado este post, en homenaje a quien ha sido nuestro Papa durante los últimos 8 años y a los lugares más importantes y queridos (hasta donde se sepa) para él. Para los más curiosos, os dejo el enlace sobre los gustos gastronómicos de Benedicto XVI, de la mano de mi compañera del Blog de Ocio y Cultura Pepín y Puchín.
Que seáis muy felices y hasta la siguiente ruta por los Picos de Europa y lo mejor de Cantabria,
Siempre vuestro,
Luis Poch de Gaminde
El Viajero Incansable
rutasyotellevo@gmail.com
@viajerolpochg
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