Las provincias alemanas de Baviera y Baden se sumaron los países que confiscan bienes y dinero a refugiados para sufragar los gastos de estadía. La política es practicada por Dinamarca y Suiza.
Antes de que los refugiados puedan acceder a alguna de las ayudas por parte del Estado, agentes de migración podrán decomisar los bienes materiales que rebasen un valor superior a los 750 euros ( 752 dólares).
Los recursos son utilizados para sufragar los gastos de manutención y estadía de los inmigrantes, una vez que son agotados , entra en vigor la ayuda oficial.
La información fue revelada por el diario alemán Bild, que citó como fuente una entrevista al ministro del Interior de Baviera, Joachim Herrmann.
El ministro, según Bild, confirmó la información y detalló que se está confiscando el dinero en efectivo y los objetos de valor, como joyas o documentos, de los refugiados que llegan a Baviera para solicitar asilo.
Argumentó que el objetivo de esta medida es que los refugiados contribuyan a su propia manutención en Alemania, y una vez que se agoten esos recursos reciban la ayuda material y económica del estado alemán.
Hasta el momento no hay una declaración oficial sobre esta información debido a la hora en que se difundió, después del cierre de las oficinas públicas.
El Servicio de Prensa Evangélico (EPD) informó por su parte que obtuvo la confirmación del Ministerio del Trabajo en Berlín, respecto a que el decomiso de dinero y de objetos de valor a los refugiados es una práctica usual en los estados de Baviera y de Baden Württenberg.
La Organización No Gubernamental alemana Pro-Asyl, que representa los intereses de los refugiados que llegan a Alemania, también habría denunciado que esa es un práctica usual en este país europeo.
Citó como ejemplo el caso de los desempleados alemanes, el Estado alemán primero confisca sus bienes y su dinero para que contribuyan a su manutención, antes de que empiece a mantenerlos.
La prensa local denunció que esa práctica para con los refugiados se lleva a cabo también en Suiza, Suecia y Dinamarca.
Mientras tanto, en el centro de Europa se asentaron la nieve y temperaturas por debajo de los cero grados, lo que dificulta aún más que los migrantes lleguen al occidente de Europa.
Liene Veide, vocera de la agencia de refugiados de la ONU, afirmó que unos 2 mil migrantes cruzan diario de Macedonia a Serbia, incluso con las temperaturas bajas que alcanzan los -19 centígrados.
Agregó que por llegar sin ropa adecuada para el clima invernal, algunos tienen neumonía, fiebre u otras enfermedades. Aun así, dijo que la mayoría insisten en continuar con sus viajes.
Por su parte, el canciller austriaco dijo el miércoles que Viena quiere reducir el número de migrantes que entran al país a 37 mil 500 este año.
Van 40 refugiados ahogados en el Egeo
Al menos 12 migrantes murieron ahogados al naufragar el bote en el que viajaban con destino a Grecia.
La guardia costera turca afirmó que otros 26 fueron rescatados frente a las costas del mar Egeo, cerca de la ciudad de Izmir.
Uno de los sobrevivientes iraqué de nombre, Yusuf Alí , dijo a la agencia turca Andalou, que sus hijas y esposa murieron ahogados en el mar
“El agua comenzó a entrar al barco, no podíamos detenerla mi esposa y mi hija murieron ahogadas”, afirmó el inmigrante, que junto a otros 25 lograron sobrevivir a la travesía.
La agencia de noticias turca informó que las autoridades locales habían logrado detener a dos sospechosos de tráfico de personas.
Ankara ha intensificado, las redadas contra presuntos traficantes luego de que la Unión Europea condicionara su entrada al bloque de los 28 a cambio de que reforzara sus marcos de seguridad para evitar el flujo migratorio.
En lo que va del año cerca de unos 40 migrantes han perdido la vida en las costas turcas al tratar de alcanzar el sueño europeo.