Esta semana fue arrestada una mujer que trabajaba en una casa de ancianos en Baviera, Alemania. La policía investigó reportes que acusaban a la cuidadora de tomar fotos de sus pacientes fallecidos y de compartirlas, acompañadas de comentarios sarcásticos, a través de WhatsApp.
Las fotografías eran enviadas a dos de las compañeras de la mujer, quienes también han enfrentado consecuencias por ‘denigrar a los muertos’, crimen que podría resultar en una multa o una condena de dos años.
Las imágenes fueron descubiertas por un familiar de una de las culpables, quien notificó a sus jefes sobre los mensajes. Posteriormente, los directores del hogar para ancianos las denunciaron con la policía.