Los 718 puntos que obtuvo Günter Schaffrik (55 años) en la Prueba de Selección Universitaria (PSU) fueron una sorpresa para muchos. Esto porque terminó cuarto medio en la Escuela Intrapenitenciaria Mariano Latorre de la cárcel de Cauquenes, pero sobre todo porque se trata del ex gerente general de las principales empresas de Villa Baviera, quien desde hace tres años está privado de libertad.
Schaffrik fue condenado a 11 años de reclusión como cómplice de las violaciones cometidas por Paul Shäfer. Cursó su enseñanza media en prisión, y dio la PSU en noviembre pasado, obteniendo 718 puntos ponderados, lo que le permitió ser el cuarto seleccionado en la carrera de Ingeniería Comercial en la Universidad de Talca. Sin embargo, no podrá cumplir su objetivo.
Esto porque, según informa el Departamento de Comunicaciones de Gendarmería, “se observa incumplimiento del requisito relativo al período mínimo de cumplimiento de condena necesario para presentar una solicitud, esto es: a partir de los seis meses anteriores al día en que cumpla la mitad de la condena (año 2018)”. El comunicado agrega que “Gendarmería otorga las facilidades para todas aquellas personas privadas de libertad que tras haber cumplido con su enseñanza media deseen rendir la PSU”, aunque esto no significa necesariamente que el interno será beneficiado con un permiso especial para asistir a clases pues. “ Para la obtención de beneficios intrapenitenciarios (salida dominical, salida de fin de semana y salida controlada al medio libre), debe sesionar un consejo técnico, instancia multidisciplinaria que existe en todas las unidades penales del país y en la cual se evalúa cada caso, de manera individual y que es en definitiva la que determina si se concede o no”.
La esposa del interno, Erika Tymm, señaló que “es muy triste que no se le permita estudiar, porque si bien desde niño estaba ávido de conocimiento, en Villa Baviera no pudo completar sus estudios y sólo pudo terminar la enseñanza media estando en la cárcel”. La mujer agregó que “hay que entender que él , como todos nosotros, somos víctimas de Paul Schafer, pues Günter llegó a Villa Baviera cuando tenía dos años y Paul Schafer fue como su padre. Mi esposo no sabía nada y si Paul Schafer decía que no se podía hablar, pues nosotros no hablábamos”. Erika Tymm puntualiza que “para Günter es muy importante poder ir a la universidad, porque eso significaría la integración total, él está cumpliendo una condena, es verdad, pero tiene mucho que aportar a la sociedad”.
En tanto, Alejandro Concha, director de la escuela intrapenitenciara, también lamentó la situación , agregando que “se trata de un estudiante muy correcto, inquieto intelectualmente, respetuoso de sus compañeros y de sus profesores, participativo y colaborador, por eso creo que él sería un aporte en un aula de clases y en ningún caso representaría un peligro para la sociedad ”. El docente relató que en la cárcel de Cauquenes, Günter Schaffrik participa en un taller de mueblería, además hizo cursos de Inglés, estuvo a cargo de Biblioredes, en la escuela, fue monitor de computación y participó en un taller literario, el año pasado.
Por su parte, el prorector de la Universidad de Talca, Pablo Villalobos, quien confirmó que el postulante fue el cuarto seleccionado de la carrera de Ingeniería Comercial, indicó que si éste no se puede matricular este año, el puntaje PSU le sirve para postular en 2017, de lo contrario tendrá que rendir nuevamente la PSU. Villalobos explicó que “la Universidad de Talca, tiene diferentes requisitos de ingreso, pero entre éstos no está el certificado de antecedentes de las personas, por lo tanto , si gendarmería autoriza, nosotros no pondremos obstáculos para que él asista a clases, menos aún en una universidad pública, donde la no discriminación es efectiva”.