El fabricante de automóviles alemán BMW marcó una inusual calificación para elegir al personal de una de sus líneas de producción de la planta de Dingolfing, en la Baja Baviera: Los empleados debían tener como promedio 47 años, una media ocho años superior a la de las plantas de la compañía alrededor del mundo.

El proyecto, conocido como “Heute für Morgen” (“Hoy para mañana”) busca asegurar que BMW se mantiene como innovador tecnológico, pero no focalizándolo ahora, sino dentro de diez años. Esta línea de producción fue creada para reflejar la edad de la fuerza laboral que la compañía espera emplear en 2017.

Esta línea incluye tecnologías al alcance de la compañía que no estaban siendo utilizadas, como sillas ergonómicas especialmente diseñadas para facilitar los descansos cortos y disminuir el desgaste físico. También disponía de lupas que reducen la fatiga visual y que además, minimizan los errores de clasificación.

La coloquialmente llamada entre los empleados como “línea de los jubilados”, resultó ser un gran éxito.

Así, de la combinación salieron hasta 70 propuestas nuevas para cambiar el modo de trabajar. Y “algunas de estas ideas se han convertido en estándares para nuevos centros laborales de BMW, sin importar la edad de los trabajadores”, explica Tobias Schmidt-Reintjes, vicepresidente de estrategia de Recursos Humanos para BMW.

El grupo BMW incrementó su productividad en un 7% en el año que acabamos de cerrar y del que pronto presentará su cuenta de resultados.