Según el diario Bild, la medida es ya efectiva en los Estados federados de Baden-Württemberg y Baviera.
Alemania se suma así a Dinamarca y Suiza con la introducción de esta polémica medida.
“Los demandantes de asilo serán sometidos a una inspección a su llegada en las instalaciones para buscar documentos, objetos de valor y dinero”, afirmó el titular de Interior de Baviera, Joachim Herrmann.Herrmann explicó que cuando el dinero en efectivo o los objetos de valor superen los 750 euros (350 euros para Baden-Württemberg) las autoridades los incautarán y proporcionarán un documento oficial a la persona atestiguando la incautación.
La cantidad incautada se le devolverá en forma de servicios y prestaciones sociales en los municipios en donde se les conceda asilo.
Alemania recibió en 2015 cerca de 1,1 millones de refugiados.