En declaraciones al diario Bild, el ministro del Interior de Alemania, Thomas de Maizière (en la foto), aseguró este sábado (02.01.2015) que el país reforzará su cooperación con los servicios de inteligencia extranjeros, tras la alerta de la pasada Nochevieja sobre presuntos planes de atentados terroristas en la capital de Baviera, Múnich. La alarma llegó a las autoridades germanas a través de un organismo de inteligencia aliado.
“En el futuro habrá un intercambio aún más intenso de cooperación e información que hasta ahora con las fuerzas de seguridad de otros países”, indicó el ministro, quien aseguró que la situación de seguridad en el país ante la eventualidad de un atentado terrorista sigue siendo “muy seria”, a pesar de que las autoridades decidieron el viernes 1 de enero rebajar el nivel de alarma ante la inexistencia de una amenaza concreta.
El mismo ministro De Maizière había dicho que la amenaza terrorista en Alemania continuará siendo elevada también en 2016 y “no se reducirá en un futuro próximo”. La primera alerta de este tipo tras los atentados de París, ocurridos el pasado 13 de noviembre, ocurrió el 17 de ese mes, cuando la Policía decidió suspender un partido de fútbol amistoso entre Alemania y Holanda en Hannover debido a una alerta terrorista.
¿Existen los sospechosos?
El jefe del grupo parlamentario de la Unión Cristianodemócrata (CDU), Volker Kauder, coincide con el ministro De Maizière, y señaló también a Bild que son necesarios unos “servicios de inteligencia bien equipados que puedan obtener informaciones sobre posibles atentados y analizarlas” de forma adecuada. Para ello “es muy importante una cooperación estrecha con los servicios de otros países”, apuntó. Para Kauder, lo sucedido en Múnich muestra “una vez más cuán equivocados han estado los otros partidos, que siempre ponen en cuestión este trabajo conjunto” con otros países.
Las sospechas en Múnich apuntaban a entre cinco y siete potenciales terroristas, de origen sirio e iraquí y teóricamente vinculados a los yihadistas del grupo Estado Islámico (EI). Fuentes policiales muniquesas advirtieron ya el viernes que, pese a haberse recibido los nombres y apellidos de esas personas, facilitados por el espionaje francés, no se sabe exactamente si esas personas existen ni ha sido posible hasta ahora localizarlas.