Berlín, Alemania.
El grupo yihadista Estado Islámico (EI) es sospechoso de haber planeado un “atentado suicida” en Múnich (sur de Alemania) “hacia la medianoche” del jueves en plenas celebraciones de Año Nuevo, anunciaron las autoridades alemanas.
Las informaciones recopiladas por las autoridades alemanas señalan una amenaza de “atentado suicida”, indicó en rueda de prensa en Múnich el jefe de la policía de la ciudad, Hubertus Andrä.
El responsable policial evocó de “cinco a siete” potenciales sospechosos, si bien no se produjo ninguna detención por el momento.
Según elementos aportados por un “servicio de inteligencia amigo”, el EI había previsto el ataque “hacia la medianoche” en la estación central de Múnich o en la de Pasing, al oeste de la ciudad, indicó por su parte el ministro del Interior bávaro, Joachin Herrmann.
Ambas estaciones habían sido evacuadas y el servicio de trenes suspendido, había anunciado la policía de Múnich en su cuenta en Twitter, llamando a la población a evitar las concentraciones masivas y el transporte público.
“La policía judicial habría informado hacia las 19H40 (18H40 GMT) a la policía bávara de datos de un servicio de inteligencia amigo sobre un ataque del EI (…) previsto (…) en Múnich” en estas estaciones, indicó Herrmann, sin aclarar qué servicios eran.
Según la prensa alemana, se trataría de los servicios franceses.
Las informaciones “no [eran] fiables al 100%”, pero no pudieron descartarse, explicó el ministro bávaro.
Una portavoz de la policía dijo a la AFP que tenían “información fiable” de que un grupo criminal se preparaba para actuar durante las festividades de Año Nuevo, al tiempo que no descartó otro posible blanco de un ataque.
En Facebook, la policía de Múnich también indicó que, según informaciones “serias”, un ataque podría “tener lugar esta noche”. “Trabajamos intensamente para esclarecer la situación e investigamos posibles sospechosos”, añadió la policía en esta red social.
“Nos tomamos el asunto muy en serio, hay una intervención importante [de la policía] aquí en Múnich”, indicó un portavoz de la policía, citado por el diario Süddeutsche Zeitung.
A la ciudad llegaron refuerzos policiales del sur de Baviera y también se desplegaron unidades especiales. En total, unos 550 agentes.
Según un fotógrafo de la AFP, el ambiente era bastante tranquilo en Múnich, donde varios policías vigilaban las entradas de la estación central.
Alemania lanzó una advertencia similar el 17 de noviembre pasado, cuatro días después de los atentados de París, y, a causa de un eventual ataque, decidió anular un partido de fútbol amistoso entre su selección y Holanda en Hanóver.
Los investigadores nunca encontraron ningún explosivo en el estadio ni detuvieron ningún sospechoso. A continuación, las autoridades alemanas han rechazado en varias ocasiones aportar precisiones sobre la fuente, la naturaleza y la magnitud de la amenaza.
Las celebraciones de Año Nuevo se celebran en el mundo entre estrictas medidas de seguridad por riesgos de atentados yihadistas. París y Bruselas anularon los tradicionales fuegos artificiales.
En Berlín, donde la presencia policial se intensificó en la Puerta de Brandenburgo, cientos de miles de personas festejaron sin problemas en la calle la entrada en el nuevo año.